Marginación y pobreza: expósitos en Salamanca (1794 - 1825)
In: Serie Humanidades 24
924 Ergebnisse
Sortierung:
In: Serie Humanidades 24
In: Revista de fomento social, S. 341-352
ISSN: 2695-6462
.
In: Revista de fomento social, S. 271-284
ISSN: 2695-6462
.
In: URVIO: revista Latinoamericana de estudios de seguridad, Heft 19, S. 111
ISSN: 1390-4299
El artículo analiza la relación entre las pandillas, la violencia cotidiana y la marginación en Guatemala. Esta propuesta considera que las pandillas son un ejemplo excepcional del empleo de la violencia, y repara en la orientación de estos grupos, hacia las actividades de trasgresión de la legalidad como herramienta de afirmación y empoderamiento. En el documento se describe que el impacto de la desigual distribución de la violencia a nivel social, se acentúa en los barrios depauperados y adquiere un carácter crónico. Finalmente, el artículo menciona la limpieza social dirigida hacia el Barrio 18 y la Mara Salvatrucha porque este fenómeno es una manifestación de la profundización de las agresiones comunitarias. La violencia es protagonizada por diversos actores sociales, las pandillas son un caso más de la realidad necropolítica en Guatemala. Abstract:The article analyzes the relationship between the gangs, the daily violence, and the marginalization in Guatemala. This proposal considers that gangs are an exceptional example of the use of violence, repairs in the orientation of these groups towards the activities of transgression of law and considers the use of the body as a tool of affirmation and empowerment. The paper describes the impact of the unequal distribution of violence at the social level, it is accentuated in impoverished neighborhoods and acquired a chronic character. Finally, the article mentions social cleansing directed at the Barrio 18 and Mara Salvatrucha because this phenomenon is a manifestation of the deepening of community aggressions. The violence is used by diverse social actors, the gangs are one more case of the necropolitics reality in Guatemala.
In: Profesorado, revista de currículum y formación del profesorado, Band 22, Heft 1, S. 561-578
La formación del profesorado en contextos de marginación era una realidad sobre la que indagar. El objetivo de nuestro estudio era conocer la problemática, las expectativas y las necesidades que los docentes que trabajan en contextos de marginación identifican sobre su formación. A través del método descriptivo, diseñamos un cuestionario, llamado "Cuestionario sobre la Formación del Profesorado en Contextos de Marginación (CFPCM)" del que obtuvimos un alfa de Cronbach de .838 y en su análisis de componentes principales una KMO de .080 y esferidad de Barlett significativa. Se pasó a una muestra de 385 docentes que trabajan en contextos de marginación y aplicamos el análisis de contingencias. Podemos concluir que los docentes más experimentados se mostraron más desconfiados y realistas con la problemática que rodea la enseñanza en contextos de marginación y dudaron de la capacidad de abordaje de los problemas por parte del sistema educativo. El profesorado con experiencia manifestó expectativas más negativas sobre su formación a la hora de trabajar en contextos de marginación, frente al profesorado con menos años de docencia, que sí confiaba en alcanzar determinados presupuestos que mejorarían su formación. El tipo de necesidades sobre la formación en contextos de marginación que se expusieron también variaron en función del grado de experiencia, aunque la que logró el acuerdo de todos ha sido la relacionada con la Administración, de manera que esta tenga en cuenta al profesorado y refuerce la colaboración entre el centro y las instituciones.
In: Nueva Sociedad, Heft 211, S. 109-123
ISSN: 0251-3552
Los sindicatos mexicanos ocupan un lugar marginal como actores políticos y sociales. Esto es consecuencia de los cambios económicos generados por las políticas de liberalización y apertura y de las prácticas internas antidemocráticas, la falta de autonomía y la sumisión frente al Estado. A pesar de este panorama sombrío, últimamente han aparecido casos que demuestran la capacidad de acción de las organizaciones sindicales, como el conflicto en el estado de Oaxaca, la disputa por la deposición de Napoleón Gómez Urrutia y el enfrentamiento con la empresa Euzkadi. Para recuperar el protagonismo, los sindicatos mexicanos deberían reformular sus prácticas, ponerlas en línea con el proceso de democratización iniciado en el país y explorar formas de cooperación con las federaciones sindicales reg
World Affairs Online
La vivienda es algo más que la vivienda. Es el lugar de convivir, de reproducir la fuerza de trabajo y de construcción de lazos afectivos. La vivienda es también una de las condiciones para acceder de facto a la ciudadanía. Para muchos habitantes la vivienda es algo menos que una vivienda. La marginalidad territorial que es a su vez social genera una dinámica excluyente: dificultades formativas, vivir en un medio humano que comparte déficits de todo tipo; falta de relaciones con gentes distintas que pueden proporcionar pistas, contactos, informaciones y recomendaciones; sentirse excluido de los medios profesionales, académicos, culturales. El habitante en estos casos no puede ejercer de ciudadano, su status formal (si lo tiene) no puede ejercerlo. En nuestra cultura actual se da por obvio que todo el mundo tiene un derecho a la vivienda. Pero para muchos no lo es. El fin de muchas políticas de vivienda social no tiene como objetivo principal el bienestar de la población y el derecho a la vivienda sino el negocio privado y la complicidad de la política pública cómplice y perversa (sean cuales sean las intenciones propagandísticas iniciales). La ciudad como la vivienda es un proceso continuado, que no se puede dejar en manos exclusivas ni de gobernantes, ni de profesionales (arquitectos, urbanistas, etc.) ni de los promotores y constructores. Y menos aún de los bancos y de los propietarios del suelo. Es la ciudadanía organizada que debe promover y guiar las dinámicas urbanas. En este proceso debe conquistar los derechos legítimos socialmente pero no formalizados o si lo están pero que en realidad la mayoría o amplios sectores de la población no los pueden ejercer, como es el caso de una vivienda digna e integrada en la ciudad. ; Housing is more than housing. It is the place to live together, to increase the workforce and to build affective bonds. Housing is also one of the conditions to access de facto to citizenship. For many inhabitants, housing is something less than housing. The territorial marginality, which is also social, generates an exclusionary dynamic: formative difficulties, to live in a human environment that shares deficits of all kinds; lack of relationships with different people who can provide clues, contacts, information and recommendations; to feel excluded from the professional, academic and cultural media. The inhabitant in these cases cannot exercise as a citizen, he cannot exercise his formal status (if he has one). In our current culture, it is obvious that everyone has a right to housing. But for many it is not. The end of many social housing politics does not have as main objective the well-being of the population and the right to housing, but the private business and the complicity of complicit and perverse public policy (whatever the initial propaganda intentions). The city as housing is a continuous process, which cannot be left in the exclusive hands of leaders, professionals (architects, town planners, etc.) or promoters and builders. And even less of the banks and landowners. It is organized citizenship that must promote and guide urban dynamics. In this process it must conquer the socially legitimate but not formalized rights or the ones that are, but in fact the majority or broad sectors of the population cannot exercise them, as is the case of a decent and integrated housing in the city. ; L'habitatge és una mica més que l'habitatge. És el lloc de conviure, de reproduir la força de treball i de construcció de llaços afectius. L'habitatge és també una de les condicions per accedir de facto a la ciutadania. Per a molts habitants l'habitatge és una mica menys que un habitatge. La marginalitat territorial que és al seu torn social genera una dinàmica excloent: dificultats formatives, viure en un medi humà que comparteix dèficits de tot tipus; manca de relacions amb gent diferent que poden proporcionar pistes, contactes, informacions i recomanacions; sentir-se exclòs dels mitjans professionals, acadèmics, culturals. L'habitant en aquests casos no pot exercir de ciutadà, el seu estatus formal (si en té) no pot exercir-lo. En la nostra cultura actual es dóna per fet que tothom té un dret a l'habitatge. Però per a molts no ho és. La fi de moltes polítiques d'habitatge social no té com a objectiu principal el benestar de la població i el dret a l'habitatge sinó el negoci privat i la complicitat de la política pública còmplice i perversa (siguin quines siguin les intencions propagandístiques inicials). La ciutat com l'habitatge és un procés continuat, que no es pot deixar en mans exclusives ni de governants, ni de professionals (arquitectes, urbanistes, etc.) ni dels promotors i constructors. I menys encara dels bancs i dels propietaris del sòl. És la ciutadania organitzada que ha de promoure i guiar les dinàmiques urbanes. En aquest procés ha de conquerir els drets legítims socialment però no formalitzats o si ho estan però que en realitat la majoria o amplis sectors de la població no els poden exercir, com és el cas d'un habitatge digne i integrat a la ciutat.
BASE
In: Convergencia: revista de ciencias sociales, Band 20, Heft 62, S. 249-257
ISSN: 1405-1435
In: Revista española de ciencia política, Heft 29, S. 169-172
ISSN: 1575-6548
In: Revista de fomento social, S. 229-246
ISSN: 2695-6462
.
In: Colección Por un México social
In: Espai/ Temps 45
In: Revista española de investigaciones sociológicas: ReiS, Heft 91, S. 221
ISSN: 1988-5903