Desobediencia civil y poder político comunicativo1
La desobediencia civil proviene de la transmutación de convicciones personales a intereses grupales, es acción pública y pacífica que transgrede algunas normas jurídicas. Es esencial- mente política porque, aunque no pretenda el cambio estructural de un régimen político y jurídico, busca la enmienda de ciertas leyes o medidas de gobierno. Los desobedientes civiles pertenecen al tejido social cívico y expresan visiones éticas que han sido deficientemente inter- pretadas en el orden jurídico; si la relación del campo civil con el área estatal dista de ser comunicativa, porque la esfera estatal no recepta la dinámica de la sociedad civil, la suerte de la desobediencia civil es su destierro de la vida social; de manera distinta, si la organización estatal está al servicio de la sociedad civil, la acción de los desobedientes civiles constituye una alarma moral que advierte y propugna cambios en la vida social y en la legislación que la sustenta. ; Civil disobedience comes from the transmutation of personal convictions to group interests; it is a public and peaceful action that violates some legal norms. It is essentially political because, although it does not intend the structural change of a political and legal system, it seeks the amendment of certain laws or government measures. Civil disobedient individuals belong to the civic social fabric and express ethical visions that have been poorly interpreted in the legal order. If the relationship between the state and the civil field is far from being communicative because the state sphere does not grasp the dynamics of civil society, the fate of civil disobedience is its banishment from society. On the other hand, if state organization is at the civil society's service, the action of the civil disobedient constitutes a moral alarm that warns and advocates changes in social life and the legislation that supports it.