The seduction of the Olympics: Concentration camps and spectacle ; La seducción de las Olimp iadas: Campos de concentración y espectáculo
This article deals with the construction of subjectivities from a capitalist space-time logic based on a specific conjuncture of global significance:the Rio de Janeiro Olympics of 2016. Based upon a conceptual discussion, it takes on the current conditions of subjective production within a televised mass society in which the spectacularization of human activities endows them with ephemeral transcendence for the consumption of passive masses before a handful of subjects turned into heroes. This is the case of Olympic sports today. The Rio games marked certain continuities with their predecessors, but they deepened marked tendencies towards the construction of enclaves that are contradictorily territorialized in urban centers of global convergence, but which simultaneously suffer a geographical dislocation during a short period of time, with immense, swift and ephemeral diasporas of people from around the world. In the face of the apparent banality of sports, it is precisely there that naked behavior of contemporary subjects is exposed, willing and predisposed to relegate politics, to displace the legitimate inhabitants of a captured space, to see the world according to what the cameras show us, and get lost in the glorification of athletes increasingly distant from the common people, with training, diets, rigorous routines executed with mastery, ie without fail, more like a machine than a human body, although this body is objectified and, as such, openly sexualized. ; El artículo estudia la construcción de subjetividades desde una lógica espacio-tiempo capitalista a partir de una coyuntura específica de trascendencia global: las Olimpiadas de Río de Janeiro de 2016. Sobre aportes conceptuales, se discute las condiciones actuales de producción subjetiva en una sociedad de masas televisada en la que la espectacularización de las actividades humanas las dota de trascendencia efímera para el consumo de masas pasivas ante un puñado de sujetos convertidos en héroes. Es el caso de los deportes olímpicos en la actualidad. Los juegos de Río marcaron ciertas continuidades con sus predecesores, pero profundizaron marcadas tendencias hacia la construcción de enclaves que contradictoriamente están territorializados en centros urbanos de convergencia global, pero que simultáneamente sufren una dislocación geográfica durante un corto período de tiempo, con inmensas, veloces y efímeras diásporas de personas del mundo entero. Ante la aparente banalidad de los deportes, se rescata que es precisamente allí en donde se develan conductas al desnudo de los sujetos contemporáneos, dispuestos y predispuestos a relegar a la política, a desplazar a los legítimos pobladores de un espacio capturado, a ver el mundo según lo que la cámaras nos muestran, y a perderse en la glorificación de atletas cada vez más distantes del común de las personas, con entrenamientos, dietas, rutinas rigurosas ejecutadas con maestría, es decir sin fallas, más como una máquina que como uncuerpo humano, aunque dicho cuerpo sea objetivizado como tal y sexualizado abiertamente.