Los resultados de las investigaciones que se presentan en este libro ponen al día sobre los cambios en las políticas migratorias canadienses desde una óptica pluridisciplinaria y comparativa. Interesa aquí dar cuenta de tales mutaciones en un contexto geopolítico que incluye al continente en una lógica neoliberal que estimula el "utilitarismo migratorio". En tal sentido, se ofrecen claves de comprensión de las tendencias migratorias globales. La realidad de las movilidades de hoy en día exige cruces analíticos simultáneos entre lo local, lo nacional y lo internacional, incorporando los puntos de vista de los diferentes actores que participan del fenómeno migratorio contemporáneo. Este volumen pretende contribuir en ese sentido, mediante aportes críticos, fundados en diferentes líneas teóricas y basados en trabajos empíricos, a los debates académicos y públicos que se dan sobre este tema tan relevante en la agenda política mundial.
Los coordinadores del libro buscan dar cuenta de la complejidad que, hoy en día, caracteriza la migración de México a Canadá. Por un lado, interesa mostrar cómo las transformaciones políticas y económicas de México han configurado nuevos escenarios que impulsan y moldean los flujos de mexicanos que se dirigen hacia ese país, y cómo éstos se enfrentan a las nuevas políticas migratorias canadienses; pero, paralelamente mostrar la fuerza que tiene la dimensión social y cultural en la toma de decisiones de los migrantes. El punto de partida analítico en este trabajo, es la dimensión político-institucional, pero al mismo tiempo busca dar cuenta de los comportamientos, estrategias y perspectivas que los migrantes implicados desarrollan a la par del accionar estatal. La diversificación de los perfiles migratorios de los mexicanos en Canadá obliga a considerar con atención la historicidad en la llegada de cada grupo y los marcos políticos y legales que hacen plausible su llegada a ese país y que los encuadran. En tal sentido, este libro combina los análisis sobre corredores migratorios ya afincados con los estudios sobre las políticas migratorias canadienses, comparándolas con las de su vecina nación estadounidense. Las nociones referidas a los programas de incorporación de migrantes, planes y categorías migratorias, aluden a la dimensión administrativa por la cual los Estados nacionales ponen en funcionamiento un sistema que regula los movimientos migratorios de trabajadores temporales. Los estudios incluidos en este libro exponen, bajo diferentes ópticas, la gravitación de los mecanismos estatales canadienses en la regulación de la entrada y salida de los diversos tipos de migrantes; la inmigración económica, la reunificación familiar (por la llegada de uno o varios parientes de primera cercanía del solicitante afincado en Canadá) y, el refugio (o asilo) por razones humanitarias. Se analiza la tendencia a priorizar la llamada inmigración económica, en tanto que las otras dos han sufrido una disminución considerable en virtud de las medidas asumidas por el gobierno; se promueve el ingreso de individuos y familias que demuestren contar con recursos financieros suficientes para establecerse y sustentarse, acompañado de una evaluación determinada por nivel de educación, tipo de profesión, edad y número de hijos, así como conocimiento de una de las lenguas oficiales (inglés o francés). El crecimiento casi ininterrumpido de trabajadores agrícolas temporales se ha acotado en los últimos tiempos, y se acompaña con el de migrantes bajo otros formatos, como son: el asilo político, el de trabajador calificado, de estudiante, residente, o el simple visado para visita familiar o de turista. La obra contribuye a la mejor comprensión de la diversidad de perfiles que actualmente se observan en la migración de México hacia Canadá. ; CLACSO, CONACYT-MINCYT. Universidad del Comahue, Neuquén, Argentina. Universidad de Montreal, Canadá
Los coordinadores del libro buscan dar cuenta de la complejidad que, hoy en día, caracteriza la migración de México a Canadá. Por un lado, interesa mostrar cómo las transformaciones políticas y económicas de México han configurado nuevos escenarios que impulsan y moldean los flujos de mexicanos que se dirigen hacia ese país, y cómo éstos se enfrentan a las nuevas políticas migratorias canadienses; pero, paralelamente mostrar la fuerza que tiene la dimensión social y cultural en la toma de decisiones de los migrantes. El punto de partida analítico en este trabajo, es la dimensión político-institucional, pero al mismo tiempo busca dar cuenta de los comportamientos, estrategias y perspectivas que los migrantes implicados desarrollan a la par del accionar estatal. La diversificación de los perfiles migratorios de los mexicanos en Canadá obliga a considerar con atención la historicidad en la llegada de cada grupo y los marcos políticos y legales que hacen plausible su llegada a ese país y que los encuadran. En tal sentido, este libro combina los análisis sobre corredores migratorios ya afincados con los estudios sobre las políticas migratorias canadienses, comparándolas con las de su vecina nación estadounidense. Las nociones referidas a los programas de incorporación de migrantes, planes y categorías migratorias, aluden a la dimensión administrativa por la cual los Estados nacionales ponen en funcionamiento un sistema que regula los movimientos migratorios de trabajadores temporales. Los estudios incluidos en este libro exponen, bajo diferentes ópticas, la gravitación de los mecanismos estatales canadienses en la regulación de la entrada y salida de los diversos tipos de migrantes; la inmigración económica, la reunificación familiar (por la llegada de uno o varios parientes de primera cercanía del solicitante afincado en Canadá) y, el refugio (o asilo) por razones humanitarias. Se analiza la tendencia a priorizar la llamada inmigración económica, en tanto que las otras dos han sufrido una disminución considerable en virtud de las medidas asumidas por el gobierno; se promueve el ingreso de individuos y familias que demuestren contar con recursos financieros suficientes para establecerse y sustentarse, acompañado de una evaluación determinada por nivel de educación, tipo de profesión, edad y número de hijos, así como conocimiento de una de las lenguas oficiales (inglés o francés). El crecimiento casi ininterrumpido de trabajadores agrícolas temporales se ha acotado en los últimos tiempos, y se acompaña con el de migrantes bajo otros formatos, como son: el asilo político, el de trabajador calificado, de estudiante, residente, o el simple visado para visita familiar o de turista. La obra contribuye a la mejor comprensión de la diversidad de perfiles que actualmente se observan en la migración de México hacia Canadá. ; CLACSO, CONACYT-MINCYT. Universidad del Comahue, Neuquén, Argentina. Universidad de Montreal, Canadá
Los autores de este artículo llaman la atención respecto de la promoción de ejidos colectivos como parte de la política agraria del gobierno de Luis Echeverría, como recurso para enfrentar las presiones sociales, económicas y políticas engendradas por el desarrollo del capitalismo en el campo. Analizan modalidades de los diferentes proyectos, en un momento de polarización de los estratos y las clases sociales, afectados de manera diversificada pero al final viviendo en un descontento creciente por la situación desventajosa para la mayor parte de la población. En el trabajo, los autores ejemplifican sus planteamientos a partir del caso de un municipio del estado de Hidalgo, en donde los rasgos fundamentales eran la escasez de empleo en el campo y la competencia entre los trabajadores, la organización del trabajo para la producción y las formas de contratación prevalecientes, así como los salarios y las condiciones laborales. A partir de las enormes diferencias económicas y sociales entre los propios ejidatarios empujados a la colectivización, analizan el reflejo de la lucha interna entre los campesinos más ricos y los más pobres, que impediría una visión de colectivización y las contradicciones para incluso intentar vivirlo, o plantearse alianzas y otras formas de acercamiento en el marco de relaciones que implicaban la opresión y la explotación del trabajo de unos por los otros. Paradójicamente, la oposición a la colectivización fue el punto de convergencia, aunque el rechazo tuviera razones diferentes.
Los autores de este artículo llaman la atención respecto de la promoción de ejidos colectivos como parte de la política agraria del gobierno de Luis Echeverría, como recurso para enfrentar las presiones sociales, económicas y políticas engendradas por el desarrollo del capitalismo en el campo. Analizan modalidades de los diferentes proyectos, en un momento de polarización de los estratos y las clases sociales, afectados de manera diversificada pero al final viviendo en un descontento creciente por la situación desventajosa para la mayor parte de la población. En el trabajo, los autores ejemplifican sus planteamientos a partir del caso de un municipio del estado de Hidalgo, en donde los rasgos fundamentales eran la escasez de empleo en el campo y la competencia entre los trabajadores, la organización del trabajo para la producción y las formas de contratación prevalecientes, así como los salarios y las condiciones laborales. A partir de las enormes diferencias económicas y sociales entre los propios ejidatarios empujados a la colectivización, analizan el reflejo de la lucha interna entre los campesinos más ricos y los más pobres, que impediría una visión de colectivización y las contradicciones para incluso intentar vivirlo, o plantearse alianzas y otras formas de acercamiento en el marco de relaciones que implicaban la opresión y la explotación del trabajo de unos por los otros. Paradójicamente, la oposición a la colectivización fue el punto de convergencia, aunque el rechazo tuviera razones diferentes.