El libro completo recoge las contribuciones que colegas y discípulos dedican a José Remesal con motivo de su jubilación como catedrático de Historia Antigua de la Universidad de Barcelona. El contenido es, forzosamente, heterogéneo dada la cantidad de participantes y la diversidad de campos de conocimiento que abarca: de la historia del Próximo Oriente a la antigüedad tardía, de la historia económica a la social, pasando por las instituciones y el derecho. Este hecho refleja la amplitud del magisterio del profesor Remesal, cuyos discípulos trabajan en ámbitos de investigación muy diferentes. ; El curso académico 2011 – 2012 me encontraba en segundo año del grado de Historia en la Universidad de Barcelona. Ese año, como asignatura de formación obligatoria, cursé "Epigrafía i Numismática" con el Prof. Lluís Pons Pujol el cual, en una lección sobre epigrafía anfórica, nos habló de la existencia del CEIPAC y de su director, el Prof. José Remesal Rodríguez. Enseguida me interesé, por la labor investigadora del CEIPAC y por la trayectoria del Prof. Remesal llevándome a leer, el discurso que pronunció el día de su ingreso como académico de número en la Real Academia de la Historia y el libro sobre la Annona militaris; dos obras que resumen, en una minúscula parte, la tarea que el Prof. Remesal ha desarrollado a lo largo de su vida académica.
The rural policy come from McSharry's reform supports the approval of programmes that promote the adoption of methods more compatible with the environment and holding the population in rural areas by the reassessment of resources and natural spaces. This measure defends, in like manner, the replacement of the policy of holding the production for the incomes policy. The former has produced considerable surplus. These new propositions involve a series of supplemental measures (reafforestation of agricultural lands or the adoption of techniques compatible with the environment) to avoid a spectacular reduction of farmers' incomes. These measures show in the Venetian region local effects. These are consequence of incompatibilities and overlapping between laws, slowness in the passing of EU laws or the complex procedure for their negotiation. ; La política agraria emanada de la reforma McSharry aboga por la adopción de políticas que favorezcan la utilización de prácticas más compatibles con el medio físico y el sostenimiento de la población en las zonas rurales mediante la revalorización de los recursos y los espacios naturales. Esta iniciativa propugna, asimismo, la sustitución de la política de sostenimiento de la producción que ha generado cuantiosos excedentes por la de mantenimiento de las rentas. Estos nuevos postulados implican una serie de medidas de acompañamiento (reforestación de antiguas tierras agrícolas o la adopción de técnicas compatibles con el medio ambiente) para evitar una reducción drástica de las rentas de los agricultores. Estas disposiciones presentan en el Véneto unas repercusiones puntuales como consecuencia de las incompatiblidades y solapamientos que se vislumbran entre diversos reglamentos, la lentitud en la adopción de las disposiciones comunitarias o el farragoso procedimiento para su tramitación.
La política agraria emanada de la reforma McSharry aboga por la adopción de políticas que favorezcan la utilización de prácticas más compatibles con el medio físico y el sostenimiento de la población en las zonas rurales mediante la revalorización de los recursos y los espacios naturales. Esta iniciativa propugna, asimismo, la sustitución de la política de sostenimiento de la producción que ha generado cuantiosos excedentes por la de mantenimiento de las rentas. Estos nuevos postulados implican una serie de medidas de acompañamiento (reforestación de antiguas tierras agrícolas o la adopción de técnicas compatibles con el medio ambiente) para evitar una reducción drástica de las rentas de los agricultores. Estas disposiciones presentan en el Véneto unas repercusiones puntuales como consecuencia de las incompatiblidades y solapamientos que se vislumbran entre diversos reglamentos, la lentitud en la adopción de las disposiciones comunitarias o el farragoso procedimiento para su tramitación. ; The rural policy come from McSharry's reform supports the approval of programmes that promote the adoption of methods more compatible with the environment and holding the population in rural areas by the reassessment of resources and natural spaces. This measure defends, in like manner, the replacement of the policy of holding the production for the incomes policy. The former has produced considerable surplus. These new propositions involve a series of supplemental measures (reafforestation of agricultural lands or the adoption of techniques compatible with the environment) to avoid a spectacular reduction of farmers' incomes. These measures show in the Venetian region local effects. These are consequence of incompatibilities and overlapping between laws, slowness in the passing of EU laws or the complex procedure for their negotiation. ; Investigación realizada gracias a una beca postdoctoral del Ministerio de Asuntos Exteriores Italiano y que se desarrolló del 01-01-1998 al 31-08-98 en el Departamento de Geografía de la Università degli Studi di Padova, bajo la dirección del catedrático Dario Croce
En el margen superior izquierdo : "Histoire de la Révolution Francaise par M.A. Thiers" ; Copia digital . España : Ministerio de Cultura y Deporte. Subdirección General de Coordinación Bibliotecaria, 2018
Relieve : sombreado ; Escala gráfica ademas en leguas de 25 al grado ; En el margen superior izquierdo : Histoire de la Revolutión Francaise par M.A. Thiers ; Copia digital . España : Ministerio de Cultura y Deporte. Subdirección General de Coordinación Bibliotecaria, 2018
Relieve : sombreado ; Escala gráfica ademas en leguas de 25 al grado ; En el margen superior izquierdo : Histoire de la Revolutión Francaise par M.A. Thiers
Veränderungen, wie sie durch die Globalisierung und die wachsende Anwesenheit von Immigrant(inne)en in Westeuropa entstehen, bringen das traditionelle Konzept des Bürgertums in eine Krise: das formale Kriterium der (Staats-) Bürgerschaft ist nicht länger von Bedeutung für die Aufnahme bzw. die Inklusion einer wachsenden Anzahl von Menschen wie Drittstaatsangehörigen. Ein Forschungsprojekt wie das im Beitrag vorgestellte, das die Forderung von Zuwanderer(inne)n nach (Staats-) Bürgerschaft (MEZZADRA 2001) zu untersuchen beabsichtigt, muss sich deshalb an einem pragmatischeren Verständnis von (Staats-) Bürgerschaft orientieren. Teilweise auf der Grundlage der Arbeiten anderer Autor(inne)n, die das Thema untersucht haben, hat die Verfasserin dieses Beitrags ein multidimensionales Model zur Analyse der Selbstorganisation und der politischen Teilnahme von Zuwanderer(inne)n in Italien und im Besonderen in der Veneto-Region entwickelt. Das Model berücksichtigt vier Faktoren, die großen Einfluss auf die zivilgesellschaftliche und politische Teilnahme von Immigrant(inne)en ausüben können: 1. der supranationale und nationale Kontext; 2. das lokale Zuwanderungsfeld, 3. die infra-politische Sphäre, den kulturellen Hintergrund, die transnationale Dimension und 4. individuelle Faktoren (wie Geschlecht, Alter, Aufenthaltsdauer etc.). Die Forschungsresultate zeigen die Wirksamkeit dieser Faktoren und ihre Bedeutung in der Entwicklung von "(Staats-) Bürgerschaftsforderungen bei Zuwanderern" (MEZZADRA 2001) und verdeutlichen, dass für viele Zuwanderer(innen) die formale (Staats-) Bürgerschaft keine zwingende Voraussetzung für die aktive Teilnahme in der Aufnahmegesellschaft darstellt. URN: urn:nbn:de:0114-fqs060347 ; The changes related to globalisation and to the increasing presence of immigrants in Western Europe place the traditional concept of citizenship in crisis: formal citizenship is no longer a means to inclusion for an increasing number of people, such as non-EU immigrants. A research project, like the one presented in ...
La localidad de Chipilo de Francisco Javier Mina en México, fundada en 1882, preserva una orientación identitaria particular vinculada a sus ancestros procedentes principalmente de la Región del Véneto, en Italia. Desde un enfoque teórico de asimilación segmentada, este artículo busca mostrar el desarrollo de la cooperación internacional descentralizada entre la comunidad chipileña y el pueblo véneto de Segusino, hermanado con Chipilo desde 1982. Siguiendo una metodología de recopilación documental, con un enfoque de interpretación cualitativo de distintos testimonios, los resultados de la investigación revelan la importancia de la memoria y de los vínculos transnacionales en los procesos de asimilación segmentada para los descendientes de inmigrantes en las sociedades que los acogen.
La gran sorpresa de las últimas elecciones italianas no fue tanto el retorno de Silvio Berlusconi al poder por abrumadora mayoría, sino los excelentes resultados de sus aliados de la Lega Nord (Liga Norte), que hace no pocos años se la daba por fuerza política próxima a la marginación del sistema político italiano. El éxito del partido liderado por el polémico Umberto Bossi no sólo se dio en número de votos; también lo hizo en su capacidad de determinar el rumbo del actual gobierno, dado que el movimiento no aceptó sumarse al nuevo gran partido de Berlusconi (Popolo della Libertà), sino que prefirió mantenerse como colaborador independiente. Dicho de otra forma: la permanencia en el poder de la derecha italiana está sujeta al apoyo de Bossi, quien no ha dudado en dejarlo en claro apenas superada la instancia electoral: "Berlusconi ha voluto sposare la Lega e ora deve eseguire gli ordini" afirmó –por no decir amenazó- en el tono "políticamente incorrecto" que caracteriza al político lombardo, designado Ministro de Reformas.Nacida a fines de la década de 1980 por la unión de distintos movimientos secesionistas y federalistas, principalmente provenientes de la Lombardía y el Véneto (y curiosamente con líderes de pasado ultraizquierdista), podríamos definir a la Lega Nord como una fuerza política autonomista de naturaleza política bidimensional. El centro de su discurso político es la idea de la Padania, supuesta nación creada por y para el movimiento que engloba todo el norte italiano (el término hace referencia a la cuenca del río Po) , siendo los sustentos de dicha concepción tanto elementos económicos como culturales. Lo curioso del caso, y lo excepcional respecto a los demás nacionalismos o regionalismos europeos, es que el factor económico precede en tiempo e importancia al cultural. La Padania no es construida en base a un conjunto de características étnicas, lingüísticas o raciales particulares. La creación del concepto se debe a: a) la prosperidad del industrializado norte italiano en comparación con el mucho menos desarrollado sur y b) la noción de que Roma (es decir, la clase política tradicional) impide un mayor desarrollo del norte mediante una política fiscal redistributiva destinada a desviar fondos a las regiones del sur.La dimensión cultural toma entonces un carácter secundario, si bien no se han escatimado esfuerzos en el pasado para dar proceso fundacional a una "nacionalidad" propiamente dicha, o al menos dotar a la Padania con símbolos de identidad a los cuales apelar: el "Sol de los Alpes" sobre fondo blanco como bandera, el "Va, pensiero" de Giuseppe Verdi como himno, el recuerdo de las hazañas de las ciudades noritalianas frente a las sucesivas invasiones del Sacro Imperio Romano-Germánico y Francia, etc. A esto debemos agregar una serie de simulacros políticos, desde una "declaración de la independencia" en 1996 hasta unas elecciones al "Parlamento de la Padania" en 1997. Pertenecen estos últimos acontecimientos a la etapa más "radical" del movimiento, donde no ocultaba sus ansias secesionistas.No obstante, dos hechos facilitaron, de manera progresiva, una transición ideológica a planteos más moderados y razonables, al menos en el tema autodeterminación. En primer lugar el convencimiento de que para alcanzar cualquier espacio de poder institucional (incluido en el norte mismo), la Lega debía pactar con la derecha nacional italiana en manos de Berlusconi (Forza Italia) y Gianfranco Fini (de la ex neofascista Alleanza Nazionale). En segundo lugar, y como consecuencia de las dos victorias consecutivas de la coalición de derechas, el hecho de que miembros del partido participaran activamente, tanto a nivel ejecutivo como legislativo, de la otrora odiada clase política instalada en Roma. Como dato significativo al respecto, recordemos que en los penúltimos comicios electorales Bossi llegó a un entendimiento con el sureño Movimento per l'Autonomia, de origen siciliano.¿Cuáles son, pues, las nuevas metas de la Lega Nord? Una Italia federal, centrada en las ideas de la Devoluzione y "federalismo fiscal". Por Devoluzione debe entenderse el progresivo traspaso de competencias políticas desde el gobierno central a los distintos gobiernos regionales (incluyendo, por ejemplo, el control sobre el aparato policial, el sistema educativo, la política sanitaria, etc.) y la capacidad de los órganos regionales a legislar sobre los mismos de forma autónoma: en otras palabras, un federalismo político en toda regla. Parte de estos reclamos ya fueron garantizados por la reforma constitucional del año 2001, pero de forma más bien simbólica. Una segunda reforma constitucional (2006), esta vez desaprobada por la ciudadanía (sólo triunfó el "Sí"en los dos bastiones de la Lega ya mencionados), no sólo garantizaba una Devoluzione completa, sino que daba el puntapié inicial al otro reclamo al que mencionamos: el "federalismo fiscal". El mismo, de acuerdo a lo prometido por Bossi en la pasada campaña, comprende en un primer momento que un 90% de lo recaudado en el Impuesto a la Renta de las Personas Físicas pase directamente a manos de los gobiernos regionales, aunque es de esperar que los otros partidos de derecha no toleren un porcentaje tan abultado.Una tercera exigencia del ahora federalista partido del Norte poco tiene que ver con los dos puntos anteriores, y sin embargo es un planteo que, en lugar de diluirse como los planes secesionistas, no ha hecho más que profundizarse y tomar protagonismo. Nos referimos al carácter abiertamente xenófobo de la Lega, especialmente contra los inmigrantes (ilegales o no) del Magreb africano o de la Europa del Este. Siendo una idea que toma vuelo en todos los partidos conservadores europeos, no debe sorprender que la última campaña del populista partido de Bossi haya hecho hincapié en este tema, tanto –o inclusive más- que en el del federalismo. Tampoco sorprende que dicho discurso haya calado hondo en Italia, un país que lleva años estancado económicamente y por lo tanto cuenta con una mayor susceptibilidad para buscar chivos expiatorios.Los resultados están a la vista: promesas de nuevas medidas anti-inmigratorias, amenaza de expulsión masiva de rumanos (muchos de ellos de cultura gitana) que han llevado a un conflicto diplomático Roma-Bucarest, palabras -por lo menos- muy poco diplomáticas por parte de Berlusconi al respecto, y violencia generalizada organizada por grupos radicales italianos contra dicha comunidad.Resta saber qué tanto el futuro gobierno italiano en manos del Popolo della Libertà "eseguirà gli ordini" de su socio menor en el gobierno: Berlusconi se ha visto obligado a afirmar y repetir que los tiene controlados; los últimos hechos señalan lo contrario. * Estudiante de la Licnciatura en Estudiso Internacionales. Universidad ORT- Uruguay.
Aus der italienischen verfassungsrechtlichen Perspektive wird die konkrete Realität des Falls Veneto untersucht, unter Berücksichtigung der Kombination aus der eigenen nationalen rechtlichen Realität, dem Recht der Europäischen Union sowie dem Internationalen Recht. ; We look into the particular case of Italian Veneto from a constitutional point of view, starting from the combination of its own national legal reality, the European Union's Legal system and International Law. ; Se examina desde el punto de vista constitucional italiano la realidad concreta del caso véneto a partir de la combinación de la propia realidad jurídica nacional, el Derecho de la Unión Europea y el Derecho internacional. ; Se examina desde el punto de vista constitucional italiano la realidad concreta del caso véneto a partir de la combinación de la propia realidad jurídica nacional, el Derecho de la Unión Europea y el Derecho internacional.
Veränderungen, wie sie durch die Globalisierung und die wachsende Anwesenheit von Immigrant(inne)en in Westeuropa entstehen, bringen das traditionelle Konzept des Bürgertums in eine Krise: das formale Kriterium der (Staats-) Bürgerschaft ist nicht länger von Bedeutung für die Aufnahme bzw. die Inklusion einer wachsenden Anzahl von Menschen wie Drittstaatsangehörigen. Ein Forschungsprojekt wie das im Beitrag vorgestellte, das die Forderung von Zuwanderer(inne)n nach (Staats-) Bürgerschaft (MEZZADRA 2001) zu untersuchen beabsichtigt, muss sich deshalb an einem pragmatischeren Verständnis von (Staats-) Bürgerschaft orientieren. Teilweise auf der Grundlage der Arbeiten anderer Autor(inne)n, die das Thema untersucht haben, hat die Verfasserin dieses Beitrags ein multidimensionales Model zur Analyse der Selbstorganisation und der politischen Teilnahme von Zuwanderer(inne)n in Italien und im Besonderen in der Veneto-Region entwickelt. Das Model berücksichtigt vier Faktoren, die großen Einfluss auf die zivilgesellschaftliche und politische Teilnahme von Immigrant(inne)en ausüben können: 1. der supranationale und nationale Kontext; 2. das lokale Zuwanderungsfeld, 3. die infra-politische Sphäre, den kulturellen Hintergrund, die transnationale Dimension und 4. individuelle Faktoren (wie Geschlecht, Alter, Aufenthaltsdauer etc.). Die Forschungsresultate zeigen die Wirksamkeit dieser Faktoren und ihre Bedeutung in der Entwicklung von "(Staats-) Bürgerschaftsforderungen bei Zuwanderern" (MEZZADRA 2001) und verdeutlichen, dass für viele Zuwanderer(innen) die formale (Staats-) Bürgerschaft keine zwingende Voraussetzung für die aktive Teilnahme in der Aufnahmegesellschaft darstellt.
I.- En diversos artículos recientes de nuestra publicación hemos tratado algunos de los múltiples aspectos críticos que particularmente las últimas elecciones europeas y la crisis de Ucrania han revelado. Además de las notorias dificultades operativas de Bruselas en materia diplomática e incluso militar, se ha señalado el creciente malestar "antieuropeo" que por lo general se muestra bajo una creciente importancia de discursos de corte más bien "nacionalista".Todo los analistas han señalado que las elecciones mostraron una tendencia a la derechización del electorado, impulsada por partidos de derecha, y hasta de extrema derecha, de los cuales hay ejemplos variados, desde Hungría a Grecia, para simplificar y no enfrascarnos en enumeraciones engorrosas.Ese "anti-europeísmo" que viene empaquetado de una retórica nacionalista rancia y anacrónica en realidad no parecería merecer una atención mayor porque no nos parece decisiva en los verdaderos problemas que aquejan a la construcción europea. Las odas a "Marianne", que Marine Le Pen borda para alimentar a su electorado de "petits boutiquiers", apestan a poujadismo de bajo nivel. En un mundo donde todo lo verdaderamente relevante es esencialmente global, reivindicar una vuelta atrás hacia "las raíces nacionales" sólo es populismo barato destinado a juntar votos despistados y exacerbar sentimientos anti-inmigrantes.Por eso, ese relato es un relato sin futuro. Y esa falencia, o mejor dicho esa impostura, ya ha quedado demostrada reiteradas veces. El electorado de los países europeos vota a esas derechas -(o a algunos partidos folklóricos, del estilo del Partido Pirata sueco)- en las elecciones europeas que tienen muy pocas consecuencias políticas directas en la vida de los ciudadanos y retorna casi siempre a votar al centro -(o mejor dichos a los distintos centros)- cuando se trata de las elecciones nacionales que son las que efectivamente cuentan. Por lo menos hasta ahora eso ha sido así, con diferentes acentos, más o menos marcados, en uno u otro sentido.Aunque resulte un poco tedioso repetirlo, el proyecto europeo nunca tuvo componentes explícitamente anti-nacionales ni fue concebido como un proyecto de "debilitamiento" del Estado nación. Todo lo contrario: cada paso en el fortalecimiento del proyecto europeo significó un fortalecimiento de todos y cada uno de los integrantes del proyecto, a menos que se insista en hacer descansar la soberanía nacional en la defensa de folklorismos y costumbrismos prescindibles.Desde luego que hay franceses escandalizados por el siempre creciente cosmopolitismo de su sociedad y por la generalización de los McDonalds. Hay italianos del Norte dispuestos a desenterrar sus prejuicios contra los "terrone" instalados en Milán y temerosos de las olas de inmigrantes que llegan a la Lampedusa. Al igual que madrileños prestos para criticar las peculiaridades de los andaluces o gallegos insertados en la vida moderna de la capital española o a sublevarse contra gitanos o marroquíes ilegalmente ingresados al país.Pero si se sacan cuentas, de 1950 a la fecha, prácticamente todos -(y no nos animamos a decir rotundamente todos porque hay muchos recién llegados)- los países integrantes de la Unión Europea han crecido como sociedades, como culturas, como economías, como centros financieros o turísticos, etc., gracias a que sus Estados nacionales han perdido muy poco de sus atributos históricos y la pertenencia de estos Estados nacionales a la Unión Europea les ha potenciado de manera notoria dentro del concierto europeo e internacional de naciones.Por lo tanto, quizás algo apresuradamente, es posible concluir que Europa no tiene nada que temer de un "revival" de nacionalismo en su versión más tradicional.II.- Pero la cuestión se torna mucho más compleja cuando entramos a considerar otro perfil de "antieuropeísmo" que ni se presenta ni se visualiza como tal porque en realidad se manifiesta, aparentemente, no contra Europa sino contra algunos de los Estados que hoy forman parte de la Unión.Se trata de verdaderos ataques dirigidos al corazón de la construcción europea que aparecen, ante los ojos del público, dirigidos contra distintas unidades estatales que son parte del zócalo de la unidad europea. ¡Y hay hasta algunos de estos movimientos que se pretenden fuertemente "europeístas"!El caso más benévolo, y que con razonable certeza no habrá de pasar a mayores, es el intento de un sector de la clase política escocesa, con Alex Salmond a la cabeza, y de la población de ese país de romper -(o quizás modificar profundamente)- los lazos que unen a Escocia con Inglaterra en el seno de Gran Bretaña y del Reino Unido. Se ha acordado entre Inglaterra y Escocia la realización de un referéndum para mediados de septiembre de este año pero, aunque las encuestas dan una cómoda mayoría al NO a la independencia, el acontecimiento tiene algo de"leading case". Un hipotético triunfo del SI requeriría del inicio de negociaciones con la Unión Europea para consagrar el ingreso del eventual nuevo Estado en la órbita de Bruselas, probablemente de manera rápida, para el año 2016.Decimos que el caso es "benévolo" porque, además de que un resultado favorable a los independentistas es más que remoto, en realidad las tensiones históricas entre Escocia e Inglaterra, aunque existen, pertenecen más al pasado que al presente. En realidad este está más poblado de tironeos, de corte más bien folklórico, que de contenciosos de gran envergadura.Mucho más complejo es el intento del gobierno de Cataluña de llamar a un referéndum de corte secesionista en el mes de noviembre y, por ahora, sin acuerdo alguno con el gobierno de España. Aquí el escenario es realmente distinto e infinitamente más complejo. El regionalismo secesionista catalán siempre fue de una tenacidad agobiante, se ha ido radicalizando en su discurso anti-español siempre de manera constante, y en términos de impacto sobre el Estado español las realidades son otras.Cataluña es la comunidad española que más aporta al PIB del país, con cerca del 19% del producto nacional global y ligeramente por encima de lo que aporta Madrid a ese total. Es decir que de lo que se está hablando es de "independizar" algo menos del 20% del PBI de un gran país europeo por lo que, como el lector apreciará, el contencioso en juego aquí es de otra envergadura que en el caso anterior.Aunque estos conflictos no son nuevos, es evidente que la crisis económica, las tensiones culturales, religiosas y de todo tipo generadas por la creciente inmigración han exacerbado el atractivo de este discurso "independentista" que como vimos, no se presenta como "antieuropeo" -(porque, en estos ejemplos, escoceses y catalanes se sienten "oprimidos" por Londres y Madrid pero están como en su casa en Bruselas)-. Pero, en la dinámica que llevan implícita, son infinitamente más peligrosos para el equilibrio de Europa que los "nacionalismos tradicionales" ya mencionados.Entre otras cosas porque si la nueva moda para adquirir proyección política europea -(y, con suerte, mayor cantidad de fondos de la EU)-, el problema corre riesgo de transformarse en epidemia. Los vascos arremeterían contra Madrid, también Bélgica estallaría en una ridícula micro-galaxia de "países" flamencos, wallones, germano-parlantes y quizás una región de Bruselas, o Italia perdería al Véneto por un lado y buena parte del Norte se independizaría de Roma. Y ello para no nombrar más que algunos casos obvios.En los últimos meses, la Unión Europea ha comenzado a pronunciarse con cierta contundencia frente a estas amenazas claras a su integridad. Hasta ahora por lo general, Bruselas entendía estos problemas como lo que son: problemas de los Estados miembros que ellos debían gerenciar.Pero ante la multiplicación de pretensiones "independentistas" azuzadas por la crisis, y la evidencia que Bruselas no puede permitir el socavamiento de sus fundamentos nacionales sin comprometer, precisamente, todas sus proyecciones supranacionales, han comenzado a caer los pronunciamientos europeos cada vez más claros. En lenguaje más que telegráfico, tanto las autoridades alemanas como francesas han dejado claro que cualquier movimiento de secesión es un evento "muy peligroso" para la Unión y que, en todo caso, toda futura relación de ese nuevo Estado secesionista con Europa y Bruselas, debería contar, en primer lugar, con la aprobación del país del cual la nueva entidad "nacional" acaba de escindirse.En otros términos, las dificultades futuras de Europa deben ser rastreadas más en los relatos de algunos europeístas hiper-entusiastas que en las parrafadas populistas de los nacionalistas trasnochados que acaban de lograr buenas votaciones en las últimas elecciones.